Comparación del Roomba 650 con la serie 500

Parece que fue ayer, pero ya han pasado más de 8 años desde que la empresa americana iRobot nos descubriese una nueva forma de limpiar los suelos con su robot aspirador Roomba 560.

Durante todo este tiempo, el robot aspirador autónomo más conocido del planeta ha sufrido una serie de cambios y mejoras, no muy significativos (a menos que adquieras el kit de actualización de la serie con AeroVac), pero si apreciables que han aumentado la comodidad de los consumidores.


Aun así, hasta hace poco el modelo más antiguo seguía siendo una opción muy recomendable, y según muchos, la más practica en la gama de Roombas. Es la contínua discusión sobre cuál es el mejor robot aspirador. Al cabo del tiempo, el Roomba 650 fue anunciado como el sucesor del modelo 560 (o para ser más exactos, la serie 600 es la sustituta de la serie 500) y, finalmente, los fanáticos de los robots aspiradores para la limpieza del hogar tenemos algo que esperar con interés.


Desde el año 2007, los nuevos modelos de Roomba han sufrido varios cambios para mejor, como un nuevo diseño elegante, nuevos patrones de limpieza o un control inalámbrico para manejarlo, pero no todas esas mejoras están presentes en el Roomba 650.
De hecho, la serie 600 carece del control inalámbrico o mando a distancia que el Roomba 790 posee.

El 650 es esencialmente un modelo muy similar al 560 con un cabezal de limpieza mejorado, un sistema de succión más potente, y con un diseño más sobrio en color negro totalmente.

Todos los modelos de la serie 600 tienen un ligero toque de color presente en un anillo central que, en el caso del Roomba 650, es de color amarillo canario. Es un detalle puramente estético, pero la estética también es una parte importante de los aparatos electrónicos y que mucha gente le da importancia (aunque de todos modos se va a cubrir de polvo y pelos de gato y será imperceptible).

Un conjunto de sensores ayudan a dirigir al robot 650, le dicen donde tiene que ir y como tiene que limpiar. Son esencialmente los mismos que podemos encontrar en la serie 500, por lo que no hallaremos ninguna de las mejoras que se ven en las nuevas series.
Durante el periodo de prueba al que le tuvimos sometido, el Roomba 650 trabajo eficazmente, por lo que podemos decir que hace el trabajo para el que está programado y lo hace bien.

Limpia correctamente en todo tipo de suelos sin importar si son duros de madera, de baldosa o blandos en alfombras y moquetas. Puede tener algún problema para subir en alfombras altas de más de 2 centímetros, pero los demás desniveles los supera perfectamente.

Es capaz de conseguir algo que con una aspiradora normal no podíamos, pasar por debajo de sillones, sofás, camas o mesas bajas y limpiar todas esas zonas muertas.

También puede limpiar alrededor de las patas de las sillas y las mesas y reconocer que tipo de objeto se encuentra enfrente de él, si es duro lo evita y si es blando (manteles, cubrecamas, cortinas...) pasa por debajo.

Por supuesto, todos los modelos anteriores de iRobot también pueden realizar esta acción, así que la pregunta que surge es: ¿es el Roomba 650 mejor?


El módulo de los dos cepillos de limpieza y el nuevo depósito de suciedad son las dos notables mejoras. El cabezal de limpieza de la serie 500 dejaba bastante que desear (rozando casi lo defectuoso) y en la nueva serie esto se corrige dando lugar a un sistema más sólido y preciso.

Esto significa que no tendremos tantos errores como antes, no se quedará tirado y dejará de limpiar cuando golpee una superficie irregular o un obstáculo similar. Y el nuevo depósito representa mayor succión, más capacidad de almacenar suciedad y una aspiración que puede absorber mucho mejor el pelo de los animales.

Este Roomba no tiene filtros HEPA, ni el sistema Dirt Detect serie II (pasada persistente en las zonas más sucias) de las series más actualizadas, asi que podemos decir que el Roomba 650 sí representa una mejora respecto a la serie 500, pero está claro que la serie 700 (la serie más moderna) sigue siendo bastante mejor que la 600.

Al igual que el 560, el Roomba 650 tiene función de programado. Esta es la única ventaja destacable del modelo más alto de la serie 600 en comparación con el modelo inferior 630, aunque algunas personas preferirán el color del 650 (negro sobre negro) que el del 630 (plata sobre negro), su segunda diferencia.

Así que si no planeas usar la función de programado, te sugiero que te ahorres los 50€ y elijas el Roomba 630.
Dicho esto, en mi opinión la programación es una de las funciones más útiles de estos robots aspiradores, junto con la capacidad de volver a su base cuando se queda sin batería.

En definitiva, el Roomba 650 es un muy buen robot aspirador de limpieza domestica y tiene algunas mejoras con respecto a la serie anterior, aunque estas diferencias no son tan importantes como cabria esperar ya que no ha habido tiempo suficiente entre el lanzamiento de una serie y otra.

Las mejoras están y hay que tenerlas en cuenta. Me hubiese gustado, sin embargo, que hubiesen integrado un puerto USB o alguna otra forma fácil de actualizar el software, así como sensores mejorados y un funcionamiento más silencioso.
El hecho es que la serie 700 no vale la pena por el dinero extra que supone, la serie 600 hace su trabajo correctamente, pero es una sensible evolución de la serie 500.
Quizás no veremos ningún cambio significativo en Roomba hasta que haya una seria competencia en el mercado de los robots.